Game

Damos pasos. Algunos hacia delante y otros hacia atrás, muchas veces para avanzar más deprisa. Pero a veces nos encontramos frente a una barrera que pensamos que es infranqueable. Una gran pared de ladrillos que nos impide continuar. Y nos sentamos, esperamos a que se quiebre y podamos evadirla. Pero eso no ocurre, nunca. Y, entonces, podemos utilizar nuestra parte creativa del cerebro, darle rienda suelta a nuestra imaginación y encontrar las soluciones más inusuales e imposibles que podamos imaginar. 

No podemos traspasar un muro de piedra, ni podemos trepar por una pared infinitamente larga, pero podemos convertirla en una verja que poder saltar. Podemos convertirla en una diminuta valla de jardín, e incluso en una puerta. Podemos imaginar que somos personas mágicas que traspasan paredes y se encuentran, de repente, en otro lugar. E incluso podemos saltar por encima de un muro pequeño haciendo parkour. Podemos hacer lo que queramos con nuestra imaginación. Porque un problema deja de serlo cuando tiene solución. Y si no la tiene, es que no es un problema. 

Jugamos a un juego. Un juego que dura años, muchos. Un juego donde el azar, la suerte, los errores y las decisiones de los demás son claves en nuestros propios pasos, en la creación y destrucción de esos muros. Soñamos con dar unos pasos que, estando despiertos, pensamos que son una locura, y nos mantenemos alejados de lo que verdaderamente queremos para "hacer lo correcto". Pero este juego no se juega de este modo. Las cosas no suceden como esperamos, como queremos, porque el azar, la suerte, los errores y las decisiones de los demás influyen, queramos o no. Un paso puede ser un error que nos hará dar marcha atrás y quizás demos más de un paso hacia la dirección opuesta, quizás nos quedemos aletargados, pensativos, malheridos... sin hacer nada demasiado tiempo, pero en cierto modo no es culpa nuestra. Porque traspasar un muro siempre es diferente; la dureza, el espesor, la forma, el ancho, el material... siempre será distinto. Y el tiempo, la espera, nos enseña lo que debemos aprender para poder dar el siguiente paso con más fuerza. 

Este juego no es cosa de uno solo, hacen falta más jugadores. Y lo más divertido es que el resultado nunca será el mismo.


"I'm defying gravity and you won't bring me down".


Via Pinterest.

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