Mirror mirror

Mi reflejo no es Yo. No me siento la persona a la que veo a través de ese espejo ovalado que hay en mi habitación. Me aterroriza cada día. Me hace romper a llorar cada vez que decido mirarme. Las paredes me observan esperando mi siguiente paso. Miro a la persona que me observa desde la otra parte del cristal que nos separa. "No puedo ser yo", me repito. Por la noche imagino que soy Alicia, que puedo pasar a la otra parte del espejo y ser quien quiero ser. Pero otras veces es la otra parte la que se mete en mi habitación, la que me observa y me obliga a hacer lo que no quiero hacer. Sigo pensando que el espejo se equivoca. Sigo pensando que esa persona no soy yo. No puede ser que en tan poco tiempo mi cuerpo haya cambiado de ese modo. No puede ser. Dejé de comer para no pasar por esto. Lo dejé todo a un lado para poder encajar. Pero no ha servido de nada. El espejo no me puede engañar, son un reflejo de la realidad. Pero sigo sin entender cómo he llegado hasta aquí. Me aterroriza cada día. Esa chica feliz que solía ser ha desaparecido, no está. Antes nada era complicado. Recuerdo pintarme los labios y sonreírle a mi otra yo del espejo. Pero ahora evito mi propia mirada. Como si me diera vergüenza ver en lo que me he convertido. Creo que miente, porque no puedo ver totalmente la realidad. No muestra mis heridas. No puedo ver lo rota que estoy en realidad. Quisiera romperlo, decirle quién soy en realidad. Pero me faltan fuerzas. Estoy tan débil que no puedo moverme de donde estoy. No puedo apartar la mirada del cristal. Muchas veces lo odio, quiero decir siempre. Muchas veces me odio, odio mirarme, pero está ahí, no se mueve, y me saca de quicio. Intento taparlo, pero al amanecer está ahí, recordándome quién soy en realidad, el monstruo en el que me he convertido. Hay chicas que se pasan horas frente a estos objetos que tan solo sirven para perder el tiempo y hundir a personas. Ellas son bellas, son princesas que buscan a su príncipe desesperadamente. Yo no lo busco, no pienso en encontrarlo, no pienso en que pueda gustarle a alguien, simplemente porque es materialmente imposible. Para ellas es más fácil vivir frente a estos aparatos que joden vidas. Ellas se divierten, yo me muero por dentro, me destrozo por fuera. Algunos me repiten que estoy bien, que soy normal, que no estoy gorda ni que soy fea. Pero ellos no lo tienen a él para que te diga lo contrario. No saben lo qué es. No lo saben.

~El verdadero monstruo es el creador de espejos