Nobody


Jajajajaja me río. Pero no puedo dejar de pensar en ti de ninguna manera. Me absorbes. No me da miedo lo que piensen los demás, porque eso no me importa. Tan solo me interesa lo que tú digas o pienses. Aún así, si me preguntan, siempre contesto que no hay nadie, que nadie se filtra en mis pensamientos. Pero es inevitable, siempre estoy pensando en otra cosa. Si la clase es de historia, pienso en ti. Si en la televisión estamos viendo una película, inmediatamente pienso en ti. Mientras hablo con mi madre tan solo tengo a una persona en mente, a ti. Eres como una enfermedad. Me desconcentras. A veces pienso en descubrirte, otras no, es demasiado arriesgado. Nadie te conoce por aquí. Tampoco quiero ver a mi madre histérica, a mi hermano pasar de todo... siempre es igual. Pero así mejor, así me siento más segura. Casi a cada momento necesito ver tu última conexión. A veces quiero hablarte, ¿pero de qué? No sé qué decirte, porque probablemente mis temas te aburran. Siempre hablas de fútbol, y yo lo odio. Si te digo que una película que me gusta se estrena el viernes, tú sales con que el sábado hay partido de no sé qué equipos y estás súper nervioso. Yo te animo, como siempre. Me puedo pasar horas y horas con el móvil en la mano, y a veces ni siquiera estoy escribiendo. A veces espero que me llames, pero no lo haces. Tal vez es porque no soy tan valiosa como para que te gastes dinero en mí, pero después no dudas en llamar a un amigo cuando paso una tarde contigo. Me confundes. Puedes sacar lo mejor y lo peor de mí. Muchas veces me enfado, porque no me avisas de que estás por mi ciudad. Pero claro, ¿qué te voy a pedir si tan solo soy una amistad? Tan poco me conoces de mucho, tan solo me conociste por un error de bebidas en aquel dichoso bar. Mis amigas me preguntaron si te conocía al volver a mi mesa, pero ya sabéis mi respuesta. Después nos vimos en el aparcamiento, me sonreíste, te sonreí y te acercaste acelerándome el corazón. Mi número, tu número. Y empezó una extraña amistad que acabará con mi estabilidad emocional. "¿Quién es?", nadie. "¿Con quién hablas?", con nadie. "¿Quién te llevaba en la moto?", nadie. "¿De quién estás enamorada?", de nadie. Al fin y al cabo no estoy mintiendo, porque es de nadie de quien estoy enamorada. No le importo, por lo que no debería importarme. ¿Lo entiendes? Yo no, pero lo intento.

"You are my best and worst"

Comentarios