You

Y me haces sentir. Me haces querer, amar, volar, no reconocer el camino por el que voy. Me haces vibrar y querer seguir viviendo intensamente mientras estoy a tu lado. ¿Sabes lo que quiero decir? ¿Lo has sentido alguna vez por alguien? Aunque no haya sido por mí, ¿lo has llegado a sentir? Es tan increíble que jamás me hubiera imaginado sentirme así todo el tiempo. A veces quiero morir, porque me duele tanto amarte que no sé ni cómo continuar. Jamás soñé con ser tan feliz, tan feliz a tu lado. Nadie me dijo que podría llegar a sentir tanto. Nadie me pudo explicar lo que era querer tanto a alguien que tu corazón quiera desprenderse porque no soporta tanto dolor. Me perdería en tu mirada, en cada poro de tu piel. Eres mi príncipe, y yo soy tu princesa. Seas lo que seas en tus sueños, yo soy la que te sigue o la que te espera. Sabes que siempre estaré ahí, que hagas lo que hagas, que digas lo que digas, me tendrás a tu lado. Podemos discutir o no estar de acuerdo, pero sé que siempre estaremos juntos. Tú aceptas mis defectos y soportas mis insoportables manías. Yo adoro tus manías y no me importan tus defectos, porque te quiero por quien eres, por todo tu conjunto, por todas tus pequeñas y grandes cosas. Tú eres la luz que obligó a la oscuridad a marcharse por siempre. Eres el guardián de la luz en mi vida, y puedes sentirte orgulloso por serlo. A veces me pregunto por qué aceptaste volver conmigo aquella tarde, por qué quisiste ir conmigo al cine con aquellas personas que ya nunca más volvimos a ver, por qué me seguiste después de las clases sin saber adónde me dirigía. Todavía recuerdo la primera vez que nuestras miradas se encontraron. Tú llevabas una camisa azul, y yo una camiseta turquesa. Me sonreíste y volviste a mirar de frente mientras agitabas la cabeza hacia los lados. En aquel momento no pensé que mi obsesión por tus ojos llegaría tan lejos. Semanas más tarde te añadiste a mi grupo de trabajo. Primero pensaba que querías aprovecharte de nuestro trabajo, porque no parecías demasiado trabajador, pero después me demostraste que eras todo lo contrario. Y en pocos segundos lograste conquistarme. Tan solo tuviste que mirarme a los ojos y pronunciar mi nombre. Después tuve que ingeniármelas para que no descubrieras lo que sentía por ti. No te conocía demasiado, por lo que era injusto enamorarme solo por lo que aparentabas ser. Y me di tiempo, para desenamorarme, para olvidar lo que me había enamorado a primera vista. Pero no lo conseguí. Fuiste insistente, no me dejabas olvidarte, el tiempo que tenía para mí me lo arrebataste y te infiltraste en mis sueños. No me lo podía creer. No sabía si me había enamorado del personaje que yo me había inventado a partir de lo que sabía de ti, o de ti directamente. Estaba tan confusa que no sabía por donde caminaba. A veces iba a clase tan solo para verte, para que esa sonrisa que me dibujabas en la cara permaneciera un poco más en mi rostro. Y me llamaban soñadora porque espero a un príncipe, pero ellos no saben que no es así completamente. Tan solo soy soñadora porque pienso en el futuro de una manera diferente, porque pienso en estar con alguien, contigo. Antes no tenías nombre, ahora ya no podré olvidarte. ¿Dejaste al destino trabajar o lo engañaste para que pudiéramos estar juntos? La verdad es que no quiero saberlo, soy feliz así, aunque duela tanto. Cuando estoy cerca de ti siento como todas las partes de mí se unen, pero cuando veo alejarte... algo de mi se rompe. Mi respiración se agita y llega un momento en el que no puedo respirar. No quiero verte marchar, quiero que te quedes cerca de mí. No soporto tanto dolor, no quiero sentir que alguna parte de mí se rompe, y tú formas parte de mí. No te alejes, por favor te lo pido. Intenta no irte lejos. Avísame si tienes que irte, pero por favor, nunca me olvides. Sabes que lo eres todo para mí, y si no lo soy todo para ti, espero poder recuperarme, superar todo lo que he vivido contigo, pero espero equivocarme en este pensamiento, porque te repito que lo eres todo. Y lo mejor de todo es que puedo ser yo misma, no tener miedo, dejar que me veas y entres en mis pensamientos, porque tú eres la única persona que logrará entenderme, que podrá saber por qué actúa de una manera o de otra. Pero lo que más me gusta de ti es la sensación que me dejas, esa sonrisa, esas ganas de vivir, esas ganas de futuro. Y me gusta sentir miedo, porque eso significa que de verdad me importas. Porque además soy feliz, nunca lo había sido tanto. Y el miedo y la felicidad casi siempre van de la mano, pero lo que más importa es el amor, es lo que sentimos, por lo que estamos juntos, unidos, por lo que no nos separa nada ni nadie. Siempre encontramos ese momento para seguir juntos. Encontramos ese camino, que aunque esté lleno de dificultades, logramos saltear, esquivar, borrar, difuminar, pintar, reescribir... Porque juntos siempre seremos más fuertes. Juntos somos uno. Y ya no me da miedo sentir dolor al quererte, porque sé que tú, también, por mí lo sientes.

"I just love you"